Incluso la toalla más cara puede volverse dura y perder su absorbencia con el tiempo. El principal culpable es el suavizante de telas comercial. Estos cubren las fibras de la toalla con cada lavado hasta que repelen la humedad volviendo todas las fibras duras y ásperas. Una vez que comienzan a repeler la humedad, pueden ser más difíciles de lavar. Esto puede hacer que huelan a humedad, además de estar duras. Usted puede suavizar las toallas sin limpiadores fuertes y productos especiales, solo con elementos comunes de la casa.
Ingredientes
- 1 taza de Sal de Epsom
- 1 taza de Vinagre Blanco
Instrucciones
1. Mida 1 taza de sal Epsom y agregue a las toallas una vez que la lavadora ha terminado de llenarse con agua. Esto eliminará el exceso de tinte de las toallas nuevas y la acumulación de químicos de las toallas viejas que vuelven las fibras duras.
2. Añada 1 taza de vinagre blanco a las toallas durante el ciclo de enjuague. Esto suavizará las fibras en las toallas.
3. Ponga la mitad de las toallas en la secadora y seque como de costumbre. Las cargas pequeñas aseguran que las fibras no se compriman y que las toallas puedan esponjarse correctamente.
* Agregue 1 taza de vinagre al ciclo de enjuague cada vez que lave las toallas. Puede repetir la adición de sal de Epsom si las toallas se endurecen de nuevo.