Windows Vista introduce nuevas bibliotecas y capas de seguridad que son incompatibles con programas diseñados para algunas de las versiones anteriores de Windows. Los programas diseñados para Windows XP o posterior generalmente funcionan, pero incluso algunos de ellos no se ejecutan correctamente. Afortunadamente, Windows Vista incluye una variedad de configuraciones de compatibilidad para permitir que las aplicaciones se ejecuten en un entorno más compatible. En general, la actualización de la aplicación a una versión compatible es la mejor solución. Sin embargo, si esto no es posible, utilice la configuración de compatibilidad en Windows Vista.
Paso 1
Haga clic en el icono del programa para el que desea establecer la compatibilidad y seleccione la opción Propiedades. Haga clic en la pestaña Compatibilidad en la parte superior de la ventana.
Paso 2
Haga clic en el menú desplegable Modo de compatibilidad si usted sabe la versión de Windows para la cual el programa fue diseñado. Seleccione la versión de Windows que necesita el programa. Salte esta opción si no está seguro.
Paso 3
Haga clic en Aceptar para usar estas opciones, o en Continuar para ajustar la configuración adicional. Las configuraciones Ejecutar con 256 colores y Ejecutar en resolución de pantalla 640 x 480 a veces funcionan con otros programas diseñados para los gráficos limitados. Las opciones Deshabilitar los temas visuales, Desactivar la composición de escritorio y Deshabilitar la escala de visualización en alta configuración DPI ayudan si el programa no puede manejar algunas de las características de la interfaz nueva de Vista.
Paso 4
Haga clic en la opción Nivel de privilegio si el programa fue diseñado para ejecutarse con privilegios de administrador. Haga clic en OK después de ajustar la configuración según sea necesario.