Exceso de hierro en la sangre

Es posible tener una concentración anormal de hierro en el cuerpo. El hierro puede acumularse en los tejidos de la persona y causar problemas crónicos si no busca tratamiento. Las causas de una alta concentración de hierro en la sangre varían, estos incluyen numerosas transfusiones de sangre, inyecciones de hierro, altos niveles de suplementos de hierro, trastornos genéticos, y la hemocromatosis. El problema crónico más común es la hemocromatosis, una enfermedad que puede ser mortal. Este trastorno interfiere con la capacidad del cuerpo para descomponer el hierro.

Los síntomas de la hemocromatosis y el exceso de hierro puede incluir debilidad, pérdida de peso, dolor en las articulaciones, dolor abdominal, fatiga y náuseas. Estos síntomas pueden cesar a medida que la enfermedad progresa en el cuerpo.

Si la persona con exceso de hierro no busca tratamiento puede causar complicaciones tales como hipotiroidismo, enfermedad hepática, infarto de miocardio, insuficiencia cardíaca, diabetes, impotencia, infertilidad, enfermedades neurodegenerativas y agrandamiento del corazón.

Una forma de tratamiento para el exceso de hierro es la flebotomía. El médico extrae una unidad de sangre una o dos veces por semana durante este tratamiento. Este proceso continúa hasta que los niveles de hierro vuelven a la normalidad. A partir de ahí, la sangre se controla regularmente.

Otra opción de tratamiento es seguir una dieta sana. El médico puede recomendar que evite los suplementos que contienen hierro, tales como los multivitamínicos. El consumo de alimentos que contienen vitamina C son beneficiosos ya que esta vitamina ayuda al cuerpo a absorber el exceso de hierro. También es recomendable consumir una gran cantidad de alimentos ricos en proteínas y cereales.