Existen formas de mantener la cocina limpia por imposible que parezca. Una cocina limpia hace los momentos después de la cena más relajantes y agradables. Siga leyendo para aprender cómo mantener una cocina impecable.
- Lave los utensilios mientras cocina. La primera regla de mantener una cocina limpia es lavar los platos cuando se ensucien tan pronto como sea posible. De esa manera, evita la eventual acumulación de una montaña de platos para lavar más adelante.
- Mantenga sus mostradores libres de obstáculos. Recuerde el viejo adagio «Un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar». Recordar este consejo puede ayudarle a mantener las cosas organizadas y bajo control.
- Enjuague las ollas y sartenes inmediatamente después de usar, utilice un poco de detergente y agua para ablandar la suciedad y evitar el endurecimiento de los alimentos en las superficies metálicas.
- Limpie los utensilios inmediatamente después de usar. Esto resulta útil si usted va a necesitarlo nuevamente, por ejemplo, en otra parte del proceso de preparación de alimentos.
- Limpie su estufa con regularidad. Si puede, compre una estufa con la parte superior de cerámica. Estas estufas hacen el proceso de limpieza mucho más fácil que otras estufas. Un limpiador líquido se hace cargo de cualquier derrame o desastre con relativa facilidad.
- Mantenga la regla de nunca ir a la cama con los platos sucios en el fregadero. Mantener esta regla no sólo le ayuda a estar organizada pero disuade infestaciones en su hogar.
- No ponga sus cacerolas y sartenes sucios en el horno para tenerlos fuera de vista y «lavarlos después». Es posible, pero también puede olvidarse en el horno, y la próxima vez que lo use tendrá que lidiar con sartenes calientes y muy sucios.
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